El día 13 de Septiembre de 1935, Santa Faustina tuvo una visión. En ella vió un Ángel, ejecutor de la venganza divina. En sus manos tenía relámpagos y rayos. Viendo esta señal de la ira de Dios que debía herir la tierra, más específicamente en determinada parte, Santa Faustina empezó a pedir al Ángel que tuviera piedad, a pesar de que comprendía que en presencia de la ira de Dios su oración no podía tener eficacia... Entonces vió a la Santísima Trinidad en el resplandor de su incomprensible Santidad.
En el mismo instante, la humilde religiosa experiemntó dentro de sí las palabras con las cuales, con fuerza insólita, empezó a implorar socorro por el mundo. ¡Oh prodigio! Ante aquella oración el Ángel se sintió desarmado y no pudo cumplir ya su obra de justo castigo...
He aquí las palabras con las cuales se había dirigido a Dios: "Padre eterno, Te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de tu Amado Hijo y Señor Nuestro, Jesucristo, en expiación de nuestros pecados y los de todo el mundo. Por su dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero...".
Al día siguiente, cuando iba a la Capilla, sintió interiormente esta recomendación: "Cada vez que entres en la Capilla reza en seguida la oración que ayer Yo te enseñé". Después oyó todavía detrás de sí estas palabras: "Esta oración sirve para aplacar la cólera de Dios. Tú la recitarás durante nueve días seguidos sirviéndote del Rosario, de la manera siguiente: En primer lugar reza un Padrenuestro, Avemaría y Credo; después, en las cuentas separadas o granuladas dirás: Padre Eterno, Te ofrezco (como te he enseñado), y en las diez restantes, repites: "Por su dolorosa Pasión, ten miseridordia de nosotros y del mundo entero". Al final dirás tres veces: "Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad de nosotros y del mundo entero".
He aquí como nació la Coronilla de la Misericordia. Ella tiene para nosotros varias enseñanzas, o sea que las maldades de los hombres atraen y concentran sobre el mundo los castigos de Dios; que en la ejecución de estos castigos toman parte los Espíritus Celestes, y, por fin, que las almas justas pueden mucho para alejar los azotes de Dios, si nosotros invocamos la Divina Misericordia.
Que dicha práctica de piedad sea querida de Jesús, lo certifican las promesas hechas a Santa Faustina: "Reza continuamente la Coronilla que te he enseñado. Yo circundaré de gran Misericordia a los que recitaran, ya sea durante la vida, ya más particularmente en la hora de la muerte. Que los sacerdotes la recomienden a los pecadores, como última tabla de salvación... Deseo que todo el mundo conozca Mi Misericordia. Otorgaré inmensas gracias a las almas que confíen en Ella"...
Les dejamos a continuación un video de la Coronilla a la Divina Misericordia [Cantada], tomado de EWTN El Canal Católico. ¡Que sirva para acrecentar nuestra vida de oración!
Bendito sea nuestro señor! Que dios los bendiga! Gracias por estas enseñanzas.
ResponderEliminarQUE EL SEÑOR LE SIGA DANDO LA VOZ DE SU PALABRA EN SUS CANTOS DONDE SE LLENA LOS CORAZONES VACIO DE CRISTO NUESTRO SEÑOR,Y QUE POR ESTE MEDIO EL MUNDO SE UNA EN LA ORACION DEL SANTO ROSARIO, POR LA PAZ Y LA UNIDAD DE TODOS CAMINAR CON JESUS. DIOS LOS BENDIGA POR SU TALENTO EN LA FE, EN LA CARIDAD Y EN LA ESPERANZA.
ResponderEliminarMUCHAS BENDICIONES POR LLEGAR A NOSOTROS CON EL BELLISIMO SANTO ROSARIO CANTADO.CAMINEMOS DE LA MANO DE JESUS QUE JUNTO A MARIA NUESTRA MADRE DEL CIELO NOS GUIE AL ENCUENTRO ENTRE HERMANOS POR LAS PAZ Y EL AMOREN TODO EL MUNDO ACOMPAÑEMOS A NUESTRO QUERIDO PAPA EN ORACION AMEN
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